lunes, 26 de junio de 2006

PASADO, PRESENTE Y FUTURO DE UNA CIUDAD
















Pronto hará 40 años que una noticia removería las entrañas de los cacereños, un funcionario de la policía municipal del ayuntamiento de la ciudad, conocido como Cabo Piris, manda retirar una lámina de la Maja Desnuda de Goya, por escándalo público, de los escaparates de la entonces emblemática librería cacereña Figueroa, sita en la calle Moret donde aun continúa, entonces dicha librería no se cerró.
Este año el Ayuntamiento de Cáceres, que ahora llaman la ciudad feliz, ordena el cierre cautelar de otra emblemática librería cacereña, esta vez se trata de Boxoyo, única librería situada en el casco antiguo de la ciudad su causa, según el consistorio, el peso de los libros; sobre todo cuando no se venden.
Estos hechos alcanzan un eco popular y periodístico mas allá de lo esperado que pasa nuestras fronteras sobre todo en el caso de Boxoyo, entre librería antigua y archivo, gran recopiladora del saber de los Extremeños y única en nuestra región.
Quien nos iba a decir a nosotros en la segunda mitad de los 60 que cuando se cumpliesen los 50 años de la hazaña del Cabo Piris, Cáceres, la ciudad de la alegría, podría ser considerada CAPITAL CULTURAL EUROPEA.
Como extremeño que soy y que me considero, estaría orgulloso de que Càceres fuese Capital Europea de la Cultura en 2016, como así lo ratificamos en nuestra asamblea general en 2003, comunicando nuestro apoyo al alcalde de la ciudad, aunque consideramos que hechos como estos distan mucho de los objetivos que nos proponemos. Esperamos que a 10 años vista se pueda cambiar de actitud.
A propósito de ciudad de la alegría, me pregunto, si este nombre es debido a que intramuros de la ciudad haya 40 tabernas y ninguna librería.
Juan Vicente Rosado Gómez.
Presidente de la Asociación Cultural El Bezudo.

1 comentario:

Andrés Gómez Ciriaco dijo...

Así es amigo Juanvi, los libros pesan mucho y son peligrosos, sobre todo,como tu dices, sino se venden